Con tantos productos en el mercado, es fácil caer en la trampa de las mieles adulteradas. Pero hay formas sencillas de identificar si la miel que tienes en casa es verdaderamente natural. Aquí te compartimos los secretos que usamos en Juan Miel para garantizar la autenticidad.
Evita las que incluyan “jarabe de glucosa”, “jarabe de maíz” o “azúcar añadida”. La miel pura solo debería tener un ingrediente: miel de abejas.
La miel pura tiende a cristalizar con el tiempo, especialmente en climas fríos. Si tu miel nunca cambia de textura, es probable que esté adulterada o ultrafiltrada.
Coloca una cucharada de miel en un vaso de agua. La miel pura se irá al fondo sin disolverse inmediatamente. La adulterada se mezcla rápido o forma espuma.
La miel verdadera tiene un sabor floral, con matices dependiendo de las flores de origen. La miel de Juan Miel, por ejemplo, tiene un dulzor equilibrado y un aroma sutil que recuerda los paisajes de montaña.
Nada mejor que comprar directamente a apicultores responsables, como Juan Miel. Te aseguras de la trazabilidad del producto y apoyas una práctica ética y sostenible.
👉 Recuerda, tu salud merece lo mejor. No te dejes engañar por imitaciones. Elige miel auténtica, elige Juan Miel.
